Desde sus comienzos el grupo se ha distinguido por su organización: usar cancioneros y llamar a las víctimas con anticipación.  En el 1988 Marrano se reestructura para mejor llevar a cabo nuestro objetivo de compartir nuestra música con un mayor número de hogares.  Se definen objetivos, se recoge cuota, se compra equipo, y se hacen itinerarios bien ambiciosos.  En el 1989 rompemos record con 44 parrandas. 

Alberto comienza a asistir con su bongó cuando aún era novio de Angie.  

Celebramos el 15 aniversario en Barranquitas en 1988 el cual fue todo un éxito.  Se otorgaron diplomas Doctoris Parranderum y se comió y se cantó. En esas Navidades también le dimos parranda a un Argentino (Perrone) quien cantó hasta la amanezca y a un Iraní (Kamel) quien nos demostró su dominio del salterio, uno de los instrumentos más antiguos aún en existencia y citado en la Biblia.

También dimos senda parranda en Mayagüez en casa de los Torresola quienes nos brindaron lo mejor de la hospitalidad puertorriqueña con un “cochinillo” que ni Cándido en España podría igualar.